Las pausas activas son breves periodos de actividad física realizados durante la jornada laboral para revitalizar y mejorar el rendimiento de los profesionales. Estas pausas son fundamentales para contrarrestar el sedentarismo y sus efectos negativos en la salud, que pueden derivarse de largas horas frente a pantallas sin movimiento.

Al implementar pausas activas, las empresas no solo cumplen con su obligación de velar por la salud de sus empleados/as, sino que también mejoran la productividad, la creatividad y el bienestar del equipo. ¿Cuáles son las principales ventajas de implementar pausas activas en el entorno laboral? ¡Te lo contamos a continuación!

Cuando hablamos de pausas activas durante la jornada laboral, nos referimos a cualquier pausa que fomente el bienestar físico y mental de los profesionales, sobre todo, para aquellos/as que pasan la mayoría de su tiempo sentados/as delante de un ordenador. Entre las más habituales, destacan las pausas para estirar, activar la musculatura, movilizar el cuerpo, para respirar o descansar, o las pausas de ocio, socialización o desconexión.

Ejemplos de ejercicios a realizar durante las pausas activas
- Estiramientos (cuello, brazos, espalda, rodillas y piernas) para liberar la tensión acumulada
- Caminar por la oficina, dar un paseo por el exterior o saltar
- Realizar una breve práctica de meditación, mindfulness o respiración profunda
- Acciones de teambuilding como momentos de socialización o juegos de agilidad
- Clases de pilates o yoga
- Actividades de deporte al aire libre

La compañía tiene un papel fundamental a la hora de fomentar estos hábitos saludables dentro de su plan de bienestar y prevención de riesgos laborales, teniendo en cuenta que no solo beneficiará a los profesionales, sino también a la rentabilidad de la compañía.

Beneficios de implementar esta práctica

- Mejora de la circulación, postura corporal y salud mental
- Prevención del sedentarismo y de problemas de salud a largo plazo (diabetes, trastornos cardiovasculares, problemas de visión u obesidad)
- Reducción del estrés, fatiga y tensión muscular
- Aumento de la energía, satisfacción y motivación
- Incremento de la concentración y productividad
- Fomento de la creatividad
- Mejora del clima laboral y trabajo en equipo
- Impacto positivo en la atracción y fidelización del talento

Recomendaciones para introducir las pausas activas en la compañía

- Comunicar las ventajas de las pausas activas para la salud física y mental con el objetivo de convencer al equipo de la importancia de ellas en el día a día laboral

- Aportar a los profesionales tips y ejemplos de rutina de ejercicios, adaptados siempre a los puestos de trabajo y a la situación personal. Por ello, es clave transmitir que es fundamental escuchar al cuerpo durante todo el proceso para adaptarse a lo que se necesite en cada momento

- Establecer un horario regular con el objetivo de que se convierta en una práctica que forme parte de la rutina diaria. La recomendación es que estos ejercicios sean de corta duración, entre 10 y 15 minutos

- En el caso de los ejercicios físicos, es importante recomendar a los trabajadores/as empezar la práctica con ejercicios simples, suaves y variados y ofrecer la posibilidad, si es necesario, de consultar con un médico o fisioterapeuta

- Organizar actividades en grupo, y no solo de individuales, con el objetivo de también fomentar los vínculos sociales y la colaboración entre el equipo