Cuando una persona o un equipo ha llevado a cabo un proyecto de forma ejemplar o ha desarrollado una idea que se ha traducido en una mejora para el departamento o la compañía es importante que los managers y directivos de la compañía reconozcan públicamente estos logros.

Este reconocimiento se puede traducir en recompensas monetarias como una bonificación puntual o un aumento de sueldo, o en recompensas en especias como, por ejemplo, una tarjeta regalo, un viaje de fin de semana o unas entradas para un espectáculo o evento deportivo. Pero si el presupuesto no lo permite, hay una infinidad de acciones que no comportan ningún coste y que se pueden llevar a cabo para felicitar a los profesionales:

• Agradecer públicamente el trabajo realizado y explicar de qué manera el esfuerzo se traduce en un beneficio para la empresa o para los clientes.
• Enviar un mail de agradecimiento a las personas en cuestión, con copia a los altos directivos de la empresa.
• Comunicar internamente los logros, ya sea a través de las newsletters internas, la sección de noticias del portal del empleado o bien en una reunión del área o departamento.
• Organizar pequeñas celebraciones, ya sea en la oficina o con una comida, para reconocer el hito logrado.
• Ofrecer días libres como premio.
• Organizar reconocimientos como el “empleado del mes” o el “empleado de año” para reconocer públicamente el esfuerzo de las personas más brillantes de la organización.
   

Pero con independencia de la fórmula utilizada, según la colaboradora de Forbes y experta en reconocimiento, Meghan M.Biro, es clave que el reconocimiento se dé en el momento y en el contexto adecuado, sea proporcionado con el esfuerzo realizado y sea auténtico, es decir que no se vea como algo automatizado y rutinario.