Existen distintos motivos por los que a veces estamos períodos de tiempo sin trabajar: sufrir alguna enfermedad, cuidar de familiares o disfrutar de años sabáticos. Sin embargo, explicar períodos de pausa entre empleos puede resultar complejo cuando afrontamos una entrevista de trabajo. Por ello, ¡te ofrecemos algunos consejos que te serán muy útiles para poner en valor estos periodos de inactividad profesional! ¿Cómo reenfocar el currículum para explicarlo? Por diferentes circunstancias en nuestra vida personal, como maternidad/paternidad, cuidado de un familiar, enfermedad propia o año sabático, es habitual haber estado inactivos profesionalmente. A la hora de ponerlo en el CV, pueden surgir dudas de cuál es la mejor forma para evitar que aparezcan huecos. Una de las opciones es cambiar el formato de las fechas según nos convenga por nuestra trayectoria, es decir, podemos definir los periodos según año y no según los meses. De esta forma, presentaríamos nuestro año de entrada y de salida de una actividad profesional sin especificar los meses que estuvimos trabajando. También, podemos agrupar las experiencias laborales por espacios de tiempo. Así, podríamos presentar nuestro currículum anunciando a qué empleos nos hemos dedicado en un periodo concreto. Este formato es muy útil para presentar distintos contratos temporales que se han sucedido en el tiempo. Otra forma de presentar la información laboral es construir un CV no cronológico, sino basado en nuestras experiencias laborales. Así, logramos poner el foco en los empleos que hemos tenido y no en el tiempo que hemos estado empleados. ¿Qué hacer en las entrevistas de trabajo? A la hora de abordar este tema en las entrevistas de selección, si nos preguntan por estos periodos de inactividad laboral, debemos ser claros, transparentes y no ocultar información. Abordarlo de forma natural refleja que no tenemos nada que ocultar, bien porque sabemos que hemos aprovechado el tiempo sin empleo, bien porque lo hemos dedicado a algo importante, buscando empleo o invirtiéndolo en nuestra vida personal. De hecho, un periodo de inactividad profesional es un buen momento para formarnos, realizar voluntariados y cursillos, o apostar por trabajos que nos aporten experiencia, como freelance, empresas familiares o trabajos no remunerados. La formación, el voluntariado, buscar trabajo, estudiar oposiciones o causas personales son motivos que justifican el hecho de haber pasado por un momento de inactividad profesional. ¡No dudes en ponerlo en valor en tu próxima entrevista de trabajo!